De nuevo nos reunimos "unos cuantos" para seguir fotografiando la Gran Sala GEV, de esta hermosa cavidad. Que sigue siendo la mayor sala subterránea de Europa y 4ª a nivel mundial (ver imágen proyectada en el mapa). Montaje de la imágen, cortesía de P. Jiménez.
En esta ocasión, además de los habituales, contamos con la presencia de varios espeleólogos de Madrid, C. Puch, J. Martínez y Carlos Sánchez. Nos acompañó también hasta la boca de la cavidad, P. Jiménez, autor de la imágen panorámica.
Al contrario del mes de febrero, que hacía un tiempo pésimo; esta vez lucía el sol cuando subimos al Picón.
Recientemente han sido colocados nuevos anclajes inox (químicos) para el descenso. Incluso, en la repisa de -60 hay nuevos anclajes (para poder colocar un pasamanos) que facilita la permanencia en ese exiguo lugar.
El descenso a la Torca se sucedió sin contratiempos Colocamos dos cuerdas en la vertical de 90 m (campana) para "acelerar" la salida.
Los nuevos anclajes permiten una instalación más cómoda de la vertical que los anteriores, que posíblemente tengan ya bastantes años (están oxidados).
La sesión fotográfica, dirigida por J. Granja, dió los frutos que esperábamos, unas excelentes fotografías que serán publicadas, en breve, en una revista de gran tirada. -es el motivo de que no se vean aquí-
Alguno de los que estaban allí, a pesar de ser ya "veterano", demostró estar en una excelente forma física. Necesitó menos de 9 min. para subir la vertical de 90 m de la campana de la Torca.
En la Torca (ver foto), lamentáblemente, existen pintadas del paso de gente. No todas estas inscripciones son nacionales, hay algunas de grupos extranjeros, como la que se ve en la fotografía.
Esa manía de "las pintadas" debería estar proscrita. Del mismo modo, que abandonar basura, carburo, etc.
Varios de nosotros hemos abandonado ya el carburo, cambiandolo por sistemas de iluminación a base de LED. En concreto, tres de nosotros llevabamos SCURION; y en una cavidad de las dimensiones de la Torca, se nota la diferencia respecto a otros sistemas.
A la salida, el tiempo había cambiado, y un fino sirimiri nos acompañó hasta el aparcamiento de Pozalagua.
Con una excelente cena en el restaurante "El Cartero", finalizamos la jornada.
Nota
No está nada claro el tema de "los permisos" para visitar esta cavidad. El motivo está en la reglamentación del Parque Natural de Armañón (PRUG), al cual pertenece la cavidad, que todavía se halla en fase de trámite. Pero en el momento que sepamos algo, lo comentaremos en el blog.
Fotos: D. Dulanto, J. Martínez y P. Jiménez (imágen panorámica)