miércoles, 12 de agosto de 2009

EROSIÓN Y NIEBLAS











Ya se sabe que en el norte lo de "sol y moscas" es relativamente poco frecuente. Lo que sí es frecuente en verano son las nieblas. Y si no llueve, la niebla tiene su encanto. ¡aunque algunos se pierdan...!
Aprovechando una tarde de agosto me acerco hacia el Gorbea. Esta vez por el embalse de Iondegorta al cual se accede por una empinada pista desde la central eléctrica de Lanbreabe. La idea es ir hacia la majada de Aldamiñape por un camino/pista que obvia la pista cementada que usan los vehículos autorizados y no autorizados. La sorpresa es que para cortar uno bosquecillo de pinos (Cipréses de Lawson) han destrozado el camino; y las lluvias han hecho el resto dejando unos surcos de 1 metro de profundidad. ¡luego nos hablaran de cuidar el Parque Natural del Gorbea! El camino ha quedado destruido.
Unas fotos sirven para darnos cuenta del desaguisado. La tala de los pinos ha dejado un paisaje kárstico lleno de tocones, ramas y huellas del paso de maquinaria pesada.
Junto a la pista que asciende al embalse discurre el Barranco de Lanbreabe, un lugar que esconde bellos parajes y que sobre todo su parte final merece una visita a los que gustan de esos sitios.

Fotos: D. Dulanto