La guardia civil investiga a la pareja de la buceadora de 37 años, Lorena García Martín, fallecida en una inmersión en la Cueva del Agua en Isla Plana (Murcia). La pareja de la fallecida, Ismael D. H. está imputado de homicidio imprudente.
Ismael y Lorena llevaban unos cuantos meses manteniendo una relación sentimental. Una de las cosas que más les unía era su pasión por el submarinismo. El sábado 18 de enero, la pareja se sumergió en la Cueva del Agua en Isla Plana: un laberinto mortal que arrastra una terrible lista de buceadores fallecidos y que se terminó cobrando la vida de Lorena García Martín, una profesora de Educación Primaria, con solo 37 años, que no supo o no pudo volver a la superficie, lo que ha provocado que su novio esté ahora en la diana del Instituto Armado.
EL ESPAÑOL ha confirmado en exclusiva -por fuentes de total solvencia- que el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS) "investiga" a Ismael D. H., de 41 años, por el supuesto homicidio imprudente de su propia pareja sentimental.
Una de las claves del giro de 180 grados que ha dado este caso, de accidente de submarinismo a presunto homicidio imprudente del novio de la difunta, radica en la titulación que poseen Ismael y Lorena. "El investigado es instructor de buceo en cuevas, con título de espeleobuceo, mientras que la víctima mortal contaba con formación para sumergirse en aguas abiertas, pero no con una titulación específica de instructora en cuevas", tal y como advierten las citadas fuentes a este diario.
"El investigado era instructor y expuso a la fallecida al riesgo de sumergirse en una cueva sin acreditar su formación". De momento, la Guardia Civil ya ha tomado declaración a Ismael que se presenta en uno de sus perfiles de Instagram, como instructor de buceo IN2. "Lo que hizo es como meter a alguien en un circuito de motociclismo con una moto de gran cilindrada, teniendo solo un permiso para conducir una escúter".
De momento, Ismael ha contratado al conocido abogado Manuel Martínez para que asuma su defensa en la investigación abierta por los GEAS. Los buceadores de Valdemoro -especialistas en cuevas- han inspeccionado los marcadores de línea que indican las direcciones en la gruta, el estado de los amarres y de las líneas de vida, las líneas guía y las líneas permanentes que hay por los túneles, galerías, pasadizos y columnas de esta gruta submarina de Isla Plana: una de las mayores de Europa.
También están plasmando en un informe una detallada cronología de esta trágica inmersión que -supuestamente- dirigió Ismael, como instructor titulado en espeleobuceo y experto en cuevas submarinas. Las pesquisas incluyen un minucioso chequeo técnico del equipo de buceo que llevaba Lorena, prestando especial interés al nivel de oxígeno que tenían las bombonas y a la información del ordenador de su reloj.
"El reloj de un buzo es como la caja negra de un avión: se puede saber la hora exacta a la que se realizó la inmersión; la profundidad a la que llegó la víctima mortal; los movimientos que hizo por la cueva; si bajaba o subía rápido; la presión que soportó; el tiempo que estuvo bajo el agua...", tal y como explican fuentes solventes. "Este gráfico de la inmersión puede aclarar si la causa de la muerte, por ejemplo, pudo ser que la víctima realizase un salto: un cambio de una línea a otra, sin estar provisto de una línea de vida que amarra al buzo al cabo de partida".
El tiempo de reacción de Ismael es otra de las cuestiones a la que están prestando especial interés los investigadores, para precisar de forma milimétrica qué hizo este instructor de buceo a lo largo de cada minuto de aquel sábado 18 de enero. Desde el mismo momento en el que llegó a la Cueva del Agua, junto a su pareja, sobre las 20 horas de la tarde, hasta que telefoneó al 112 a las 23.04 horas de la noche, para alertar a Emergencias de que había perdido de vista a Lorena, tras realizar una inmersión.
"Parece que cuando perdió de vista a su compañera, volvió a sumergirse en la cueva para buscarla y en cuanto salió del agua llamó al 112". De hecho, las citadas fuentes aseguran que Ismael le dijo a los Servicios de Emergencias que era "urgente" que movilizasen efectivos hasta Isla Plana, para rescatar a su novia, ya que "podría seguir con vida". Sin embargo, el cuerpo de la pobre Lorena solo pudo ser extraído de las malditas fauces de la Cueva del Agua, a las 4 horas de la madrugada, cuando ya era demasiado tarde para esta docente de sonrisa perenne.
Las explicaciones que Ismael ofreció in situ a la Guardia Civil, no convencieron, a la vista de la experiencia que tenía su pareja, Lorena, ya que tras realizar cursos de buceo en aguas abiertas, cursos con formadores de los GEAS y cursos de apnea, parece que esta treintañera -supuestamente- perdió la vida cuando se estaba iniciando en el buceo en cuevas. Tal falta de experiencia -homologada con un título- podría tener consecuencias legales para su novio por ser instructor de buceo en grutas.
INFORMACIONES
https://www.laverdad.es/murcia/guardia-civil-investiga-novio-buceadora-murio-cueva-20250128094550-nt.html
https://www.elespanol.com/reportajes/20250128/ismael-investigado-homicidio-imprudente-inmersion-mortal-novia-lorena-cueva-agua/919658627_0.html